Miorrelajantes

El uso de miorrelajantes para tratar las contracturas si bien puede dar una solución rápida y efectiva, a la larga pueden traer muchos problemas.
Su uso prolongado puede crear dependencia, siendo más alto el riesgo cuanto más se recurra a ellos. Los efectos secundarios de los relajantes musculares son usuales e incluyen somnolencia, confusión, náuseas y vómitos.
Por estas razones es recomendable evitar su uso recurriendo a soluciones más naturales para prevenir y trabajar las contracturas. Desde clases de estiramiento, yoga, masajes, hay innumerables opciones para tratar y prevenir de forma segura las contracturas.
Si bien este tipo de tratamientos pueden no brindar la solución al momento como los miorrelajantes, a la larga traen un beneficio mayor.